Perfil, futuro y ulterior construcción del Frente Unido antiimperialista y antifascista

¡Nota importante de la Oficina de la ICOR! Esto es sólo una traducción automatizada del puesto. La versión francesa es la original. Si quieres ayudarnos y mejorar esta traducción, estaremos encantados. Si lo desea, puede figurar como traductor en la página de inicio. Envíenos la traducción mejorada a nuestra dirección de correo electrónico coordinationint@yahoo.co.uk.

Algunas experiencias y reflexiones (UPML, región de París) :

1. La ICOR es una fuerza internacional dinámica y rigurosa, ¡estamos orgullosos de ello! Da contenido al internacionalismo proletario, al apoyo de las luchas en el mundo y lucha por la revolución internacional. Apoya la construcción de partidos revolucionarios en todos los países.

Entre el Frente Unido y la ICOR debe haber unidad, pero también diferencias. La ICOR ha tomado una importante iniciativa para construir el Frente. ¡Somos antiimperialistas y antifascistas convencidos!

Pero el frente debe ser más amplio en su contenido político y en su actividad.

Nuestra experiencia es que el Frente no puede construirse sin un amplio trabajo sistemático y sin generar confianza entre los nuevos aliados.

En París, contamos con un amplio espectro de organizaciones e iniciativas anticoloniales y anticapitalistas. Asociaciones, organizaciones, colectivos o incluso estructuras sindicales que apoyan a la población de un país o región. Por ejemplo, una asociación antigua y muy conocida aquí es "Survie", que organiza la solidaridad con los países oprimidos por el imperialismo francés. Otro ejemplo: durante la preparación del 12 de noviembre en París, conocimos a una joven organización de la Isla de la Reunión que se opone a la opresión de esta colonia francesa.

Estas organizaciones deben tener su lugar en el Frente Unido antiimperialista y antifascista. Hay que ganarlos para que se unan al Frente. Todos sus conocimientos, actividades y valiosos vínculos deben integrarse en los del Frente Unido. Del mismo modo que necesitamos integrar a todas las personas que se preocupan por la situación del mundo; por ejemplo, los numerosos inmigrantes que nos rodean.

El Frente Unido debe posicionarse contra TODOS los imperialismos. A menudo, hoy en día, la noción de "imperialismo" se limita a una política de opresión y explotación de los países dependientes. A menudo se limita a las viejas potencias imperialistas; debe ampliarse para incluir la dependencia económica y las nuevas potencias imperialistas. Pero tenemos que hacerlo con paciencia, realizar una labor de convicción para aclarar las cuestiones.

Tomemos un ejemplo: en África Occidental, las luchas antiimperialistas han debilitado realmente la dominación de Francia. Las tropas de la operación militar imperialista "Barkhane" tuvieron que abandonar Malí, por ejemplo. De ello se aprovechan nuevas fuerzas imperialistas, como Rusia, que avanza en Malí con las milicias "Wagner". En África, Rusia es apoyada e incluso su guerra en Ucrania por el rechazo de los antiguos imperialistas. Pero ante los enormes problemas que décadas de saqueo y opresión han creado, mucha gente se aferra a la rama más pequeña. Salvo que esto es una ilusión y conduce a una división de la lucha internacional contra el imperialismo. Existe una confusión que hay que reducir con sensibilidad y previsión.

El 11 de noviembre, día festivo en Francia, tuvo lugar una conmemoración del armisticio de la Primera Guerra Mundial, organizada por varios grupos surgidos del decadente Partido Comunista Francés revisionista. Este partido también se está volviendo cada vez más chovinista, más recientemente apoyando las reformas de Macron contra los desempleados, o votando a favor de los esfuerzos militares de Francia a favor de Ucrania y en la carrera armamentística de la UE. En la concentración había unas 100 personas y 6 organizaciones de Francia, además de representantes de organizaciones internacionales y particulares. La acción se llevó a cabo en unidad contra el creciente e inminente peligro de una nueva guerra mundial y con el deseo de actuar en común.

El rasgo dominante fue, desgraciadamente, la condena unilateral de EEUU/OTAN. Fuimos, junto con otra organización, los únicos en condenar a ambos bandos en la guerra de Ucrania. Todo el mundo pudo hablar y tuvimos una mesa de prensa. Esta cooperación puntual nos permite contribuir al debate que existe en otras organizaciones sobre las posiciones correctas. Estamos haciendo campaña para que continúe el diálogo.

La oposición al imperialismo crece a medida que el mundo se hunde en las crisis del sistema y urge una estructura antiimperialista y antifascista.

Muchas organizaciones no son comunistas. Es correcto que se modifique el llamamiento para dejar claro que el objetivo socialista tiene cabida en el Frente Unido, pero que no es una condición previa para unirse a él. Sin embargo, la cooperación requiere estar abierto a la cooperación y al debate con nosotros, los comunistas. El trabajo de los comunistas contra el imperialismo, debe aclarar su carácter y sus fundamentos (capital financiero, capitalismo monopolista de Estado), debe convencer con el tiempo de la necesidad y la posibilidad del socialismo.

Organizar el mitin de la ICOR del 12 de noviembre en París, decidido en el último seminario web a principios de octubre, supuso para nosotros un gran esfuerzo en tan poco tiempo junto a otros compromisos, pero el resultado fue positivo. El encuentro nos permitió profundizar en los vínculos que nos rodean y crear nuevos contactos. Los encuentros internacionales son muy atractivos. En segundo lugar, la presencia de jóvenes fue muy apreciada: hubo jóvenes activistas que hablaron desde Oriente Medio, África, Alemania y Francia. En particular, las actividades conjuntas son importantes para organizaciones pequeñas como la nuestra en Francia. Y los jóvenes rebeldes de Alemania estaban contentos con su "aventura" en París.

La importancia de la clase obrera en un frente unido antiimperialista y antifascista: se quieren y se necesitan cambios en el fondo de la sociedad capitalista. Estos cambios necesitan una fuerza igual a la de nuestros enemigos. Las luchas de la clase obrera en los sectores estratégicos en octubre en Francia mostraron una renovación de fuerzas, lo que hizo reaccionar al gobierno, que utilizó la violencia, las amenazas de cárcel para forzar el cese de las huelgas.