«La campaña en torno al Día Internacional de Lucha por el Medio Ambiente con la ICOR» en Francia

Ya en verano, la UPML había decidido hacer una verdadera pequeña campaña en otoño, que hemos preparado desde principios de septiembre mediante una formación interna sobre el tema.

Hemos diseñado de manera llamativa la convocatoria de la ICOR que muestra el carácter internacional y coordinado de la acción mediante las firmas. Hemos distribuido esta convocatoria a nuestros alrededores, con un stand en la universidad y en un barrio obrero, en una concentración el 6 de noviembre y ante la puerta de una empresa de la SNCF donde trabajamos desde hace varios años. Además, un artículo de 4 páginas profundizaba en la cuestión ecológica para Francia, las posiciones del gobierno y de los distintos partidos para mostrar la necesidad de crear un nuevo partido revolucionario. ¡El tema interesa a la gente y tuvimos muchos debates!

Un collage con los carteles de la ICOR "Salvar el medio ambiente ante la economía de lucro – ¡se necesitan soluciones revolucionarias!" invitaba a un debate público en torno a la cuestión, en la serie de nuestro "Café militante", que se entiende como formación colectiva y popular.

Encontramos mucho interés en los stands. Muchos debates en la calle giraron alrededor de la pregunta: ¿Quién es el responsable de la espantosa destrucción del medio ambiente? Hablamos de ello en detalle en nuestra breve contribución a la página web de la ICOR.

La cuestión ecológica y la social deben ir a la par para convencer. Para ello, intervenimos en el proletariado con la frase de Carlos Marx: "El capital agota a ambos: al trabajador y a la naturaleza".

¡La COP 26 fue un fracaso absoluto! ¡Ninguna decisión corresponde a la urgencia vital de la situación! ¡No hay verdadera ayuda a los países dependientes para los que la catástrofe ya está presente! Un camarada de Camerún habló de la tierra arrasada en África dejada por los imperialistas, ¡donde la catástrofe ya está presente!

¿Por qué fracasan los COP?

En el Café Militant, profundizamos en la cuestión. ¿Es culpa sobre todo de la India o de China los países muchas veces insultados, quienes de hecho construyen de manera brutal y capitalista cientos de nuevas centrales eléctricas de carbón en los próximos años? ¡NO! El sistema imperialista mundial obliga hoy a todo consorcio multinacional a destruir deliberadamente el medio ambiente para imponerse en el afán de lucro y en la exacerbada competencia entre las muchas nuevas potencias.

Un ejemplo de ello es Total, uno de los poderosos consorcios petroleros internacionales de origen francés con su megaproyecto "Tilenga". En la actualidad, Total está construyendo el oleoducto más largo del mundo, de 1.500 km, desde Uganda hasta Tanzania, por lo que hasta ahora más de 100.000 personas han sido desplazadas de sus tierras y se han destruido reservas naturales, lo que ha provocado la ira de amplios sectores de la población. Pero el gobierno de Macron –elegido "Campeón de la Tierra" por la ONU hace tres años– apoya formalmente el proyecto y el Estado ugandés ha hecho detener y acusar a activistas medioambientales por oponerse a este proyecto. Los altos cargos del Estado y de los grandes consorcios son intercambiables como Patrick Pouyanné, director general de Total, consejero técnico o director de gabinete bajo diferentes gobiernos franceses. Los supermonopolios internacionales han erigido su poder sobre toda la sociedad, y sus organismos y los de los Estados y organismos internacionales se han fusionado.

Los COP son útiles … para el marketing de los contaminadores como Total, Shell, Chevron, etc., invitados a la mesa de negociaciones, para promover y concluir negocios; ¡para su lavado verde (greenwashing)! Este es también el caso de la energía atómica, que el gobierno francés promueve en Glasgow como la energía limpia del futuro.

Numerosos ejemplos en todos los sectores de la producción y la vida muestran la catástrofe a la que nos conduce el capitalismo: hay que cambiar todo el sistema de modo revolucionario, pero ¿por dónde empezar ahora? La cuestión del medio ambiente debe ser incorporada a todas las luchas porque concierne a todas ellas: la lucha por los puestos de trabajo y los salarios, la lucha de las mujeres, el futuro de la juventud, la lucha contra la guerra imperialista, etc. Promover el socialismo revolucionario como perspectiva requiere fortalecer las fuerzas revolucionarias y la lucha ideológica, contra el anticomunismo. La literatura marxista-leninista nos está armando para esta lucha: se han vendido 4 libros de "Alarma de catástrofe" y 1 sobre "La crisis de la ideología burguesa".

Hemos propuesto a los contactos que se organicen en los Amigos de la ICOR y en la UPML ¡y seguimos en este sentido. ¡En Francia nos falta un partido revolucionario! La voz de los comunistas debe volverse más fuerte.¡ En este sentido, nos alegramos de que, con motivo del Día del Medio Ambiente, la cooperación entre las organizaciones miembros de la ICOR en París también continúe y resulte eficaz a largo plazo!