Informe 1. Mayo

En vista de la crisis económica y financiera mundial, así como de la pandemia de la corona, el Primero de Mayo de este año estuvo marcado por fuertes enfrentamientos. Ya el año pasado, el MLPD había propagado que era posible manifestarse con protección sanitaria y espíritu de lucha incluso en condiciones de corona. En su momento, esto fue rechazado de plano por la dirección del sindicato y la mayoría de las organizaciones pequeñoburguesas. Sin embargo, las concentraciones y manifestaciones militantes, a menudo con el MLPD como protagonista, tuvieron lugar en 100 ciudades en 2020. Los funcionarios del sindicato no quisieron quedarse con las ganas, sobre todo porque la destrucción masiva de puestos de trabajo, los recortes salariales, los recortes en las plazas de formación para los jóvenes y las divisiones machistas entre los trabajadores son combatidos cada vez con más decisión por una masa de trabajadores. Así, este año el Primero de Mayo ha salido a la calle en todas partes, marcado por las delegaciones de trabajadores y, cada vez más, por los jóvenes. A diferencia del año pasado, la Federación Alemana de Sindicatos (DGB) había convocado en parte actividades locales, sobre todo mítines. Esto correspondía al deseo de numerosos sindicalistas y es el resultado de un año de trabajo minucioso del MLPD tras el exitoso Primero de Mayo del año pasado. En las ciudades en las que la DGB sólo celebraba actos en línea, se celebraron concentraciones y manifestaciones organizadas de forma independiente, animadas y culturalmente ricas. A menudo, la Alianza Internacionalista, en la que participa el MLPD, tomó la iniciativa. Delegaciones de trabajadores de empresas industriales, educadores y enfermeros, banderas sindicales, partidos y organizaciones revolucionarias y grupos de jóvenes militantes caracterizaron la imagen de estas manifestaciones. Por el contrario, el candidato de la CDU a la cancillería, Laschet, hizo el ridículo en Düsseldorf: habló ante un aparcamiento casi vacío con 85 coches, en el que su discurso fue transmitido por la radio del coche, mientras que en el centro de la ciudad 550 personas, en su mayoría jóvenes, se manifestaron y discutieron sobre la perspectiva social.

Los temas de las concentraciones fueron la lucha contra la destrucción de empleo, el empeoramiento de la situación de los jóvenes en la crisis económica y financiera mundial agravada por la pandemia de Corona, pero también en la sanidad y los cuidados. Un éxito es que los representantes individuales de la DGB se manifestaron explícitamente en contra de cualquier restricción del derecho de reunión con el pretexto de la pandemia de Corona. Especialmente en Alemania del Este, pero también en el Oeste, la lucha de los trabajadores del metal por la equiparación de las horas de trabajo fue un tema importante. El MLPD fue un componente evidente, a menudo líder y formativo, e introdujo el auténtico socialismo como alternativa social en los discursos. El objetivo era dar a conocer y vender el nuevo libro de Stefan Engel "La crisis de la ideología burguesa y el anticomunismo". Pues el anticomunismo se revela hoy como un obstáculo central en el camino de los trabajadores hacia el socialismo científico. Fue sorprendente el interés que mostraron los trabajadores: ya se han vendido varios cientos de libros. En muchos lugares se anunció también, con muchos aplausos, la fundación del frente único antiimperialista y antifascista, que también ocupó un amplio espacio en el periódico Rote Fahne del MLPD. También se difundió la creación y la importancia de la ICOR.

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