Convocatoria para la construcción del frente único antiimperialista y antifascista internacional
Traducciones existentes
- AUFRUF ZUM AUFBAU DER INTERNATIONALEN ANTIIMPERIALISTISCHEN UND ANTIFASCHISTISCHEN EINHEITSFRONT
- CALL FOR BUILDING THE INTERNATIONAL ANTI-IMPERIALIST AND ANTIFASCIST UNITED FRONT
- Convocatoria para la construcción del frente único antiimperialista y antifascista internacional
- Appel à la construction d’un front uni anti-impérialiste et Anti-faciste international
- Призыв к строительству интернационального антиимпериалистического и антифашистского единого фронта
¡Construyamos el frente único antiimperialista internacional contra el saqueo imperialista, el terrorismo de Estado, la fascistización, el fascismo, contra la intervención militar extranjera, la subversión y las guerras de agresión! ¡Por la liberación nacional y social, por la democracia, la libertad y el socialismo!
La crisis económica y financiera mundial de 2008 repercutió como un acelerador de fuego en la lucha por el nuevo reparto del mundo. Hoy como antes, el agresivo y antipopular imperialismo estadounidense es la más fuerte potencia imperialista y el principal instigador de guerra. No obstante, se ha desarrollado un mundo multipolar.
Se agudiza la lucha competitiva interimperialista. Todas las potencias imperialistas avanzan agresivamente en la lucha por el predominio sobre fuentes de materias primas y mano de obra baratas, mercados, campos de inversión y esferas de influencia. Entre las grandes potencias imperialistas se libra una encarnizada lucha por el nuevo reparto del mundo. Crece el peligro de una guerra mundial.
Han aparecido nuevas potencias mientras que otras quedan atrás. Ésta es la ley del desarrollo desigual. La consecuencia inevitable bajo las condiciones del imperialismo es la competencia implacable entre las potencias imperialistas. Unidas están sólo en la explotación y opresión del proletariado y de los seres humanos del mundo, o sea, en su hostilidad hacia la lucha de liberación de las masas explotadas y oprimidas, en particular de la clase obrera revolucionaria y de los partidos revolucionarios del mundo.
En este contexto ha madurado el tiempo para que nazca una fuerza que, de manera organizada y con creciente unificación, se enfrente a este sistema imperialista mundial: ¡en un frente único antiimperialista contra el saqueo imperialista, las imposiciones neoliberales, el terrorismo de Estado, el racismo, la fascistización, contra la intervención militar extranjera, la subversión y las guerras de agresión – por la liberación nacional y social, por la democracia, la libertad y el socialismo! Ha llegado el momento de que el proletariado oprimido y los pueblos del mundo se integren con sus movimientos específicos y nacionales en este creciente movimiento mundial conjunto con visión de futuro.
El esclarecimiento sobre el carácter del imperialismo, la discusión sobre los cambios en el sistema imperialista mundial y el consenso, las decisiones y las conclusiones correctas para la estrategia y táctica de las fuerzas democráticas del mundo, constituyen una tarea fundamental del frente único antiimperialista.
En todo el mundo, como en Ucrania, Siria, Yemen, Venezuela, el Este de Asia y otros lugares se lleva a cabo la lucha imperialista por la hegemonía en el mundo sobre las espaldas de los pueblos. La tendencia general hacia la preparación de guerra imperialista agudiza el peligro de guerra. Se expresa crecientemente en el aumento de movimientos fascistas, en guerras comerciales, el rearme masivo, grandes maniobras militares, provocaciones deliberadas, amenazas de invasión, conflictos locales hasta una confrontación directa entre países imperialistas y llega finalmente al peligro inminente de una 3a Guerra Mundial.
El frente único antiimperialista debe ser un frente único antifascista. Hay que rechazar y parar con decisión y combatividad a los dirigentes fascistas o fascistoides como Trump, Erdoğan, Modi o Bolsonaro, pero también la derechización de los gobiernos y partidos burgueses en la mayoría de las democracias burguesas, así como la fascistización de los aparatos de Estado. Esta tarea es urgente.
Imperialismo significa reacción en toda la línea. Por lo tanto, el frente único antiimperialista pone en la agenda la lucha por preservar y ampliar los derechos y libertades democráticos. Colocamos en la mira el anticomunismo de los sectores dominantes con el que intentan desacreditar el socialismo como alternativa al imperialismo ante los ojos de las masas.
Las obreras y los obreros del mundo sufren cada vez más peores condiciones de explotación y opresión bajo el dominio del neoliberalismo y del terrorismo de Estado. En el imperialismo las fuerzas productivas revolucionarias, al fin y al cabo, se convierten en su contrario, pese a todos los avances sociales y tecnológicos. En todos los continentes hay diariamente huelgas que cada vez más se unen con las luchas populares de las amplias masas. Pero estas luchas todavía se realizan mayormente de manera aislada, en un marco nacional y sin suficiente intercambio de informaciones y apoyo mutuo de los revolucionarios y obreros en todo el mundo. ¡Sólo unida y movilizada, la clase obrera internacional, con el moderno proletariado industrial como núcleo, puede afrontar el sistema imperialista mundial y convertirse en una fuerza superior! La clase obrera internacional debe ser la columna vertebral y la fuerza dirigente del frente único antiimperialista.
El proletariado mundial necesita y busca la alianza con todos los pueblos oprimidos de este mundo – los campesinos pobres, los pueblos indígenas, las mujeres, la juventud, los refugiados, los trabajadores migrantes, las minorías y todos los demás que luchan por la democracia y la libertad. Las luchas de liberación en muchos países de África, América Latina y Asia, las luchas de liberación del pueblo filipino, kurdo y palestino y de otros pueblos tienen un adversario imperialista común, el capital financiero internacional, y ellos ejercen una influencia revolucionaria y una atracción con visión de futuro. ¡Sus experiencias deben ponerse a disposición de todos los explotados y oprimidos del mundo!
La sobreexplotación de la naturaleza acelera la transición hacia una catástrofe ecológica global que pone en peligro los fundamentos de vida de la humanidad. Esto afecta en particular a las obreras y los obreros, por sus condiciones laborales que amenazan su salud; también los pequeños campesinos y obreros rurales y otras partes inmensas de la población están fuertemente afectadas por inundaciones, huracanes y sequías. ¡La lucha por puestos de trabajo, por mejores condiciones laborales, o por mayores sueldos debe ser unida y coordinada con la lucha por salvar el medio ambiente de la desenfrenada economía de lucro!
Las miles de millones de mujeres particularmente oprimidas tienen que unir su lucha por la igualdad de derechos, contra la impronta patriarcal-feudal de sociedades, por la liberación de la mujer, con la lucha antiimperialista, así como con el movimiento obrero y revolucionario.
La juventud del mundo ve amenazado su futuro. A menudo está a la cabeza de las luchas de masas. Su energía y su vigor deben fortalecerse mediante una clara conciencia antiimperialista y una educación para ser luchadores inquebrantables por el futuro.
Llamamos a combinar la fundación del frente único antiimperialista con una discusión de estrategia sobre cómo se puede conquistar una sociedad liberada de la explotación y opresión. Partimos de que muchas fuerzas participantes consideran que el socialismo es la alternativa.
¡Lucha contra el imperialismo! ¡Abajo el saqueo imperialista, el terrorismo de Estado, la fascistización del Estado, el fascismo, las intervenciones militares extranjeras y guerras de agresión!
¡Proletarios de todos los países, uníos!
¡Proletarios de todos los países y pueblos oprimidos, uníos!
¡Por la liberación de la humanidad de la explotación y opresión – por la liberación nacional y social, por la democracia, la libertad y el socialismo!