Por una fuerza de izquierda independiente

La situación en que se encuentra el mundo actualmente refleja la desesperación de los obreros y de otras partes de las masas trabajadoras. Las masas están claramente descontentas con sus actuales condiciones de vida. Quieren el cambio. A falta de una alternativa de izquierda viable, partes de las masas buscan este cambio en el sector de la extrema derecha. Sólo esto explica por qué Trump pudo ser elegido, por qué fue realizado el Brexit, por qué Marine Le Pen, aunque ella no fuera elegida, pudo ganar un porcentaje tan grande de los votos, como también lo pudo la AfD en Alemania. Esta es la razón, por la cual actualmente hay un cambio en los gobiernos electos en América del Sur, donde partidos que apoyan medidas de derecha, en muchos países han ganado las elecciones. Esta tendencia se puede ver a nivel mundial.

En esta situación entre muchos liberales en la sociedad hay un sentimiento de que las estructuras anteriores eran mucho más mejores. Hay un sentimiento que Hillary Clinton hubiera sido la respuesta a los problemas de los EE.UU, que Merkel sería una héroe en Alemania, así como Macron en Francia. Hay la tendencia de presentar a Kirchner como candidata favorita para la Argentina y al Partido del Congreso como la solución para India.

En esta situación es necesario para los revolucionarios aclarar que no se puede ir atrás en la historia. El antiguo "Estado del bienestar" no es la respuesta a los problemas que enfrenta el mundo. Sólo el socialismo puede solucionar estos problemas. Es este "Estado del bienestar" el que ha causado estos problemas. No era otra cosa más que una otra forma del capitalismo e imperialismo en el mundo que fue adoptado para asegurar su supervivencia. El "Estado del bienestar" no fue capaz de solucionar las contradicciones inherentes del capitalismo y fue abandonado con las crecientes crisis a favor de una política neoliberal.

Por eso los revolucionarios tienen que construir en cada país una fuerza de izquierda independiente en lugar de formar bloques con los políticos del centro. Los revolucionarios tienen que analizar la situación concreta en cada país y ofrecer alternativas sobre la base de principios socialistas para los problemas concretos de la gente, como educación, salud, puestos de trabajo, industria, agricultura, etc. Sólo por este camino se puede construir una alternativa de izquierda viable que ayudará a ganar otra vez a la juventud, a los obreros y a las masas trabajadoras por el socialismo y comunismo.

En esta situación se observa otra tendencia que dice que hay una amenaza de guerra. Esto se presenta como argumento para apoyar a Clinton en vez de Trump, a Merkel en vez de la AfD o a nivel mundial a políticos del centro en vez de la extrema derecha. Sin lugar a dudas, en la situación actual hay un gran peligro de guerra. Ya que la crisis del capitalismo continúa a extender sus garras sobre la economía mundial, es que el imperialismo intentará a solucionar esta crisis mediante la guerra. No se pueden ignorar los focos como en el Oeste de Asia y en el Mar Meridional de China o lugares como la Ucrania. Pero, al mismo tiempo la situación no es así que tengamos que apoyar a las fuerzas del centro para evitar la guerra. Los revolucionarios deben ser conscientes de esta situación.

Ésta es la situación en que tenemos que aclarar con soluciones concretas para los problemas concretos de la gente que la única alternativa consiste en:

Proletarios de todos los países, uníos

Proletarios y pueblos oprimidos de todos los países, uníos,

el socialismo.

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