EL PARTIDO COMUNISTA (mlm) FRENTE A LA CRI
LA MARCHA POR EL TIPNIS Y LA INTERVENCIÓN POLICIAL
Hemos hecho conocer a su debido tiempo nuestra posición respecto a la crisis desatada con motivo de la construcción de una carretera por el medio del Territorio Indígena-Parque Nacional Isiboro-Sécure (TIPNIS) En esa oportunidad, expresamos que se trataba de una contradicción en el seno del pueblo, es decir que era una contradicción no antagónica y que su solución dependía de un diálogo sincero y franco entre el Gobierno, las organizaciones indígenas y las comunidades que habitan el Parque.
El proceso de diálogo fue rechazado de plano por la dirigencia de la marcha que, fuera del punto concreto de la carretera, añadió otros 16 puntos que era imposible conceder como son, entre otros, la suspensión de los trabajos de prospección y producción de petróleo para gasolina y diesel que el país debe importar a precios internacionales.
El gobierno insistió en la necesidad del diálogo y destacó varias comisiones ministeriales para tratar de encontrar una conciliación, empero las propuestas no contenían nada nuevo y se persistía en la urgencia de la construcción de la carretera. Los marchistas, por su parte, insistían para hablar con el Presidente, lo que pudo haber sido aceptado sin menoscabo alguno de la dignidad presidencial.
La verdad es que una vez iniciada la marcha que tenía características profundamente indígenas de defensa de su territorio, se fueron incorporando poco a poco, elementos negativos como fue la intervención declarada de la “Embajada”, de las ONGs que intervienen siempre a favor de sus proveedores y sus intereses trasnacionales y finalmente de la derecha que, en su inermidad, intenta ganar terreno en todos los conflictos que puedan presentarse.
Al presente, declaramos vehementemente que el conflicto carretero, que ya fue magnificado con los famosos 16 puntos que representan la partidización del conflicto ha cambiado profundamente de naturaleza y se ha convertido ya en una crisis de carácter político porque la derecha y el imperialismo, a quiénes les importa poco o nada el TIPNIS y los derechos indígenas, aprovechando ladinamente la circunstancia de la marcha, han desatado todo un conflicto de proporciones nacionales que tiene por objeto estratégico, bloquear el proceso, derribar al Presidente y finalmente restaurar la dominación oligárquica.
Como se ha aprobado en nuestro Quinto Pleno del CC,: «La controversia sobre la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos, debe ser solucionada entre el Gobierno y las Comunidades indígenas, por tratarse de una “contradicción en el seno del pueblo”, lo que significa que tanto la necesidad urgente de vincular por carretera a los departamentos de Cochabamba con el Beni, así como la conservación del pulmón de oxígeno que representa la reserva del Isiboro-Sécure, constituyen legítimos postulados que requieren una conciliación»
Consideramos que es un derecho legítimo cuestionar la construcción de una carretera que puede contaminar drásticamente el medio ambiente de un Parque Nacional, en este caso es preciso plantear alternativas a los trazos de la carretera, empero cuando este derecho se encuentra lesionado por otro tipo de intereses subalternos pierde su legitimidad y sirve de pretexto para la oposición política reaccionaria.
Advertimos que la falta de comprensión --por parte del entorno y los asesores del Gobierno-- de la POLITICA, COMO CORRELACIÓN DE FUERZAS SOCIALES, que cambia permanentemente fortaleciéndose o debilitándose en razón de la dinámica social, determina la agudización de conflictos en el seno del pueblo que son aprovechados muy diligentemente por la derecha y el oportunismo político.
Consideramos que no se pueden negar algunos esfuerzos del gobierno para solucionar el conflicto por la vía más conciliadora, empero siempre trató de imponer a toda costa la construcción de la carretera por el mismo corazón del TIPNIS. Por otro lado, se pudo y se puede percibir claramente, posiciones francamente provocadoras de “Quinta Columna” en el seno del Gobierno y algunas manos negras que lejos de administrar mejor los conflictos sociales no hacen sino profundizarlos y radicalizarlos, en beneficio político de la derecha y en perjuicio del proceso de cambio que tanta sangre y sacrificio ha costado a los pueblos bolivianos y que ahora se pone en peligro, en gran parte por los errores que se cometen consciente o inconscientemente.
Observamos sorprendidos, que la actitud de algunos dirigentes indígenas como el caso concreto del “dirigente” de CONAMAQ, Rafael Quispe y de algunos políticos miserablemente resentidos que ponen sus intereses personales por sobre el interés mayor de defender una coyuntura política altamente favorable al pueblo que puede perderse, agregó otro elemento de radicalización que ha ido convirtiendo el conflicto en una grave crisis política.
Rechazamos rotundamente la violencia utilizada por la policía que fue enviada naturalmente por el Ministerio de Gobierno, en la intervención de la marcha indígena que pudo originar víctimas graves, resultado que era buscado afanosamente por los impulsores ocultos de la marcha para encontrar el tan anhelado “muertito” o los “muertitos”, para achacarlos al Gobierno como “masacrador” y “genocida.
Rechazamos la abrumadora campaña mediática de la derecha cavernaria que compara del modo más infame al actual gobierno con las dictaduras fascistas del pasado, lo cual es evidentemente una aberración. Esos mismos medios de comunicación dominados y de propiedad de la derecha, han cometido un crimen mayúsculo al anunciar en medio de una inocultable satisfacción, el “número” y la “edad” de varios “muertos” virtuales. Este “detalle“ no puede ser pasado por alto.
Criticamos severamente a la actitud impolítica del Gobierno que no tuvo la capacidad de prever la gravedad del conflicto en sus orígenes y que ahora que ya se ha convertido en una verdadera crisis, trata de conjugarlo tardíamente, error que evidente que ha sido reconocido por el propio presidente.
Denunciamos a organizaciones falsamente medioambientalistas como LIDEMA, (financiada por PL-480 de EE.UU., USAID de EE.UU., Fundación Konrad Adenauer de Alemania, Fundación McArthur de EE.UU., Embajada de Holanda. ¿Qué hace una ONG financiada por EE.UU., Alemania y Holanda en la marcha del TIPNIS? Igualmente FOBOMADE y otras que sustentan un radical “conservacionismo” para bloquear proyectos productivos en los países antiimperialistas, mientras promueven los bonos de carbono, para permitir a sus empresas financiadoras deforestar y contaminar el mundo. Es francamente alarmante que los dirigentes de la marcha en su pliego, planteen mecanismos idénticos a los que el Banco Mundial promueve como el “Mecanismo de Desarrollo Limpio”, “Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación” (REDD) y el “Fondo Verde para el Clima”, que han sido correctamente caracterizados como la forma “proteccionista” del despojo del territorio, la privatización de los recursos naturales y la agudización de los daños ambientales.
Escuchamos insistentemente la voz de la derecha fascista y pro fascista por los medios de comunicación, pretendiendo sostener que EL IMPERIALISMO nada tiene que ver en el conflicto y que el mismo es solamente un asunto interno. Estos sirvientes pagados y a sueldo, como todos esos personajes que conocemos de sobra, saben bien quién los sostiene y a quién sirven. Los pueblos bolivianos y sus representantes auténticos saben bien que es ese IMPERALISMO el causante de todos los males de todos los pueblos del mundo. La absolución de culpa del imperialismo denota una ignorancia supina en torno a las manipulaciones genocidas el imperio sobre todo, en el momento actual, contra Cuba, Venezuela y Bolivia.
La determinación del gobierno de suspender el proyecto de la carretera en su segundo tramo ha sido una medida correcta aunque tardía, como ocurre muy frecuentemente pues se pudo perfectamente evitar la utilización infame del problema por la reacción y el imperialismo en perjuicio no del MAS o del Presidente, sino sobre todo del proceso de cambio que hemos de defender siempre.
En consecuencia y para quitar de en medio un pretexto para la reacción, exigimos, la cancelación definitiva del tramo II de la carretera en el TIPNIS y se proceda, por parte del Gobierno, a limpiar mediante la fuerza pública ese territorio de asentamientos de todo tipo, de madereros, de cocaleros y desbaratar todo tráfico de drogas en los aeropuertos existentes en su interior. Consideramos que la continuación de la marcha, y sobre todo su insistencia de llegar a La Paz, justo en las fechas previas a las elecciones judiciales, demuestra claramente. que el inicial carácter de reinvindicación justa de derechos de los pueblos indígenas, ha cambiado y ha cobrado un tinte abiertamente político.
Advertimos que nuestra crítica viene desde la izquierda revolucionaria que jamás, ni por un segundo se pondrá, ni siquiera tácticamente, del lado de las fuerzas oscuras de la derecha fascista que está batiendo palmas en el conflicto y menos aún del Imperialismo genocida que viene manipulando sus viles intereses en el interior del conflicto.
Sostenemos, por otro lado que la campaña contra los campesinos de tierras altas que emigraron a las tierras bajas en busca de tierra que ya escasea en las tierras altas, es también un derecho legítimo y censuramos la campaña derechista de satanizar al movimiento campesino intercultural (antes colonizadores) y a los productores de hoja de coca. Las dotaciones de tierras en favor de indígenas de las tierras altas en territorios fiscales es un DERECHO LEGÍTIMO que no puede ser negado en absoluto.
Denunciamos y rechazamos, pues enérgicamente estos arrestos reaccionarios y llamamos al pueblo y los sectores revolucionarios, particularmente a los pobladores alteños y a la gran nación aymara, auténticos creadores y sostenedores del actual proceso de cambio, a defenderlo por todos los medios, al margen de partidismos sectarios.
Concluimos, llamando al gobierno para que en el futuro se tomen otras medidas que no lleven aguas al molino de una derecha que está agazapada separando el momento de dar el zarpazo que de fin a los esfuerzos de los pueblos bolivianos por alcanzar la verdadera independencia y la democracia nueva a la que aspiramos en alianza con nuestros obreros, nuestros trabajadores, nuestros campesinos de tierras altas y bajas y finalmente de todas nuestras nacionalidades indígenas originarias que hoy están en rebelión.
¡¡Muera el imperialismo euro-yanqui!!
¡¡Muera de derecha cavernaria y fascista!!
¡¡Vivan los pueblos y clases revolucionarios/as de Bolivia!!
Comisión Política del Comité Central.
Partido Comunista (mlm) - BOLIVIA